jueves, 16 de abril de 2020

MELANCOLICO....


Melancólico…. Hoy amanecí melancólico…las teclas del piano de mi corazón han estado llamando con sus notas los recuerdos de la vida. Siento que ha pasado demasiado rápido el tiempo, y hoy que estamos viviendo esa situación que jamás imaginamos o soñamos, la música del alma canta nostalgias y recuerdos, y en esa sinfonía de emociones, hay tristezas y alegrías, y pareciera que las nubes nos tapan la visión del sol, siendo las nubes también bellas, y nos arrastran en ese sentimiento que yo llamo el susurro de las olas del mar, esas que te elevan en cada oleada y te arrastran en la calma o la rapidez de las aguas que se anidan en tu interior. Siento que la vida ha sido demasiado hermosa, que hemos caminado cada cual con sus propias luces y sombras y en todas ellas siempre ha estado la mayor luz que acompaña al hombre en la vida: Dios. Y en esa idea de buscarlo, debo hoy agradecerle porque en verdad vivir ha sido el mejor regalo, sin saber lo que ocurrirá mañana. Las páginas del libro del mundo se tornan hoy opacas, se han ido muchos que no debieron irse todavía. Nunca nadie pudo predecir la muerte, nunca nadie ha podido adelantarse o volver de ella, por eso la esperamos pacientes y llenos de calma y serenidad, en cualquier momento, ”tengan las lámparas encendidas, porque nadie sabe ni el día ni la hora”. Sin embargo hoy es un día distinto, pues ya se percibe en los aires el paso tenebroso de algo que nunca imaginamos que ocurriera, ese algo silencioso que no vemos y que de pronto se apodera de ti. Eso es vivir en ascuas, en dudas , sin esperanzas, pero es la gran oportunidad de recogernos en paz, y alejarnos del “mundanal ruido” y acoger las bondades espirituales que nos trae esta pandemia, que nos ha hecho volver a nuestros hogares, desde donde nunca debimos salir, hemos vuelto a la familia, a sentir la amistad lejana entre mensajes y sonrisas, entre llamados y recuerdos gratos de la mente, entre tanas formas, se nos ha acrecentado el ingenio por la comunicación, por el expresar a los otros que los extrañamos, pero si no hace muchas semanas que el odio imperaba en nuestras calles y el fuego de la innecesaria violencia consumía el esfuerzo y el trabajo de tantos años y las odiosidades humanas nos llevaban a un duro enfrentamiento, y a pesar de ello, aquí estamos todos, vencidos por ese algo que no podemos ver y ahora nuevamente nos acodamos de Dios y de los ángeles, y hasta rezamos más seguido y estamos adentrándonos en ese mundo espiritual que nos ha legado la vida, para entender que somos lo que somos y no valemos por lo que tenemos, sino que la felicidad es simple, es sencilla, es inmensa cuando se sabe apreciar lo que tenemos, y el sufrimiento de los demás lo podemos mitigar con la solidaridad, con el amor al prójimo y con el deseo de ser útiles a los demás. Hemos aprendido a vivir ocultos pero con la esperanza que de esta tendremos que salir vivos, amando más, sintiendo más, apreciando más, y entendiendo que Dios está presente por siempre y desde siempre en todo los que nos rodea, porque muchos de los que tanto atesoraron y lucharon, ya no están, muchos de los que pensaron que el tener era más importante que el ser, ya no están y porque a pesar de haberlo dejado olvidado en los caminos, por cuanto nos “estorbaba” y nos ”cuestionaba” las propias conductas de la vida, sin lugar a dudas sigue más vivo que nunca y está siempre presente llamándonos para sentirnos amados, cobijados y protegidos y sigue siendo el invariable, el Santo, el Rey, y la verdadera y única esperanza de este mundo , y que esperamos que sea mejor cada día, sin olvidar al hombre, al amigo, al Rey al Padre, a Jesús, que es la única esperanza, y con quien estamos todos confiados de vencer, para que cuando venga el nuevo sol, sintamos el abrazo del amor, la amistad y sentir que somos peregrinos, pasajeros de esta vida, y que el Señor nos regaló, ( y aún no nos damos cuenta), la verdadera felicidad, señalándonos en su vida, que el único camino, el más seguro, el más confiable, es el Amor.

MAYONESA CASERA

Un homenaje a  nuestra mamá.   Carlos Garcia Banda p n e o t r s S d o 3 a 9 m o f 1 a 0 a 6 2 u 3 0 2 m 5 8 2 d e 0 f   i 2 c h h 2 c 4 h 1...